viernes, 11 de noviembre de 2011

ABURRIMIENTO.-Por Ignacio Bellido

Sin necesidad de proclama

Agito el viento

Y entono el suspiro de cada instante

Para reclamar mi cuerpo.

Cierto es que aun siguen las molestias del sol

Y que la tierra ha decidido mantener su enseña

Junto al árbol benevolente

Y que el niño continuará eternamente con su juego

Pero he de cambiar mi paso

Para poder reflexionar sobre la copa de magnitudes

El porque de mi aburrimiento.

No es la sensación normal

Del no se que hacer y aquí estoy en mejunjes

Que sucede cuando han finalizado bacanales y pascuas

O cuando se ha terminado de derramar el frasco de esencias

Sobre los últimos rincones de la amada.

No,

Es otro tipo de aburrimiento

Algo que no es posible desgranar en unas líneas

Un pensamiento inmaterial

Que se resiste a ser ocupado por insignias y ritos

Y que también desconfía de las paradas de autobús

Y de las encomiendas tempraneras.

Creo que estoy en la posibilidad de no poder describir

Esta sensación,

Y siendo así no me ofendo

Ni me siento limitado

Antes al contrario

Salgo desnudo hacia las aceras de la indiferencia

Para gritar la solvencia de mi deseo.

Creo que ahora soy otro tipo de ciudadano

Que ha comprendido la longitud de sus piernas

Y acude vacío de principios

Hacia la gran aureola donde se encuentra la verdadera magnitud.

En verdad esto me ha quedado solemne

Y definitorio

Aunque no se como podré defenderlo si es que defensa mereciera.

En estas condiciones arrojo mi ultimo reloj

Al lago que me ha prestado su imagen

Y en esta semiluz de complemento

He realizado una nueva estructura a mi silueta.

Estoy contemplando como la cigüeña se aleja

El riachuelo se reseca

Y hasta el mirlo de mis contemplaciones anteriores

Reniega de mis palabras.

Creo que estoy acercándome a los primeros pasos de la plenitud

No hay comentarios:

Publicar un comentario